En estos momentos se leyó por todo el mundo, en Europa y en especial en Alemania la caída del muro de Berlín, el muro que partió a Berlín, a Alemania, a Europa suma y sigue Otros siguen en pie, dentro de los cuales está el muro erigido por el ejército marroquí en los territorios saharauis a principios de los años ochenta del siglo pasado.
Esta gigantesca obra bien fortificada, minada y custodiada por un poderoso ejército de más de 160.000 soldados, centenares de tanques, millones de minas, alambradas, sigue renovándose día tras otro.
Miles de familias saharauis permanecen separadas durante más de 30 años, viviendo el horror y el malestar de esa aterradora división.
Sus objetivos básicos, entre otros, no son más que imponer unas arcaicas y apetitosas ideas expansionistas, después de que no le funciono muy bien improvisarlas por política.
No cabe duda ninguna que la construcción por parte de Marruecos de este muro en el Sahara occidental vulnera el derecho internacional y está contribuyendo a que se cometan graves violaciones de derechos humanos.
Hoy por hoy el ejército marroquí está desplegando todas sus energías para endurecer su sistema combativo en el muro, es decir, la mayoría de las infracciones del cese de fuego se viola tajantemente sobre esta pared.
Todo esto ocurre en el momento que la comunidad internacional guarda un aturdido silencio sobre las secuelas que se derivan a raíz de la construcción y constancia de este vergonzoso muro
El pasado 8 de octubre el gobierno marroquí encarcelo a unos activistas de derechos humanos por el mero hecho de haber salido del Sahara occidental; o sea de la zona ocupada y taponada por el muro.
Semanas más tarde la activista saharaui Aminetu Haidar fue expulsada en contra de su propia voluntad, obligándola en una confabulación clara con el gobierno español de abandonar su tierra, sus hijos y su familia. Pero por cual razón? solo nos hace recordar la tradición en los espaciosas cárceles como el Sahara, que la conducta está sujeta a un código único:
la doctrina Sharon que faculta la expulsión o el asesinato a los que se contraponen a sus ideologías. Extendiendo la represión total sobre el territorio saharaui.
Obviamente el aniversario del desplome del muro de Berlín, merece ser festejado, pero hubiera sido igualmente una oportunidad más para recordar a los que persisten en la astucia de separación, manteniendo o construyendo muros y recordarles que en algún día llegara la hora del desplome de los mismos.
Pero en cambio porque algunos países occidentales remiten señales al reino marroquí a perseguir en su perpetua intransigencia, porque los que presumen estar en contra de los muros, festejando la caída del muro de Berlín son los que no escatiman esfuerzos para que otro muro poseyera más vida! Estaría pues Felipe González, Zapatero, o Nicolás Sarkozy, dispuestos a decir a Mohamed 6, por favor derrumbe el muro que habéis construido en el Sahara, como lo había solicitado el ex presidente USA Ronald Reagan a Gorbachov a finales de los años ochenta del siglo pasado en la Puerta de Brandeburgo, cuando le dijo: ¡Tire abajo ese muro!
Tendrán estos, bravura para exponer eso: DUDO.
Sería útil recordar al gobierno de Marruecos y sus aliados que en vez de reforzar a sus muros, en contra de las aspiraciones de los autóctonos y los países colindantes convendría entonces al pueblo saharaui como el marroquí merecidamente convivir en paz, a base del respeto mutuo, entablando un acuerdo de paz que culmine con las pesadillas que viven.
Fomentando la cultura de confraternización y construyendo paces.
En este sentido, el presidente de la RASD remitió una carta al alcalde de Berlín haciendo suyas las esperanzas expresadas por este al recibir el galardón en ocasión de la caída del muro de Berlín, alegando además que el derrumbamiento de este ultimo " aliente a devastar otros muros".
Hace años, o sea en la guerra, los muros nunca impidieron, las batallas del ejército saharaui encarnan en si ese reto , en cambio resistirá el muro de las sinvergüenzas caras a las vías políticas y pacifistas? , en aquel entonces se evidenciara una vez más que los muros, como las minas obstaculizaran pero no impedirán. Es hora de acción ya.
Esta gigantesca obra bien fortificada, minada y custodiada por un poderoso ejército de más de 160.000 soldados, centenares de tanques, millones de minas, alambradas, sigue renovándose día tras otro.
Miles de familias saharauis permanecen separadas durante más de 30 años, viviendo el horror y el malestar de esa aterradora división.
Sus objetivos básicos, entre otros, no son más que imponer unas arcaicas y apetitosas ideas expansionistas, después de que no le funciono muy bien improvisarlas por política.
No cabe duda ninguna que la construcción por parte de Marruecos de este muro en el Sahara occidental vulnera el derecho internacional y está contribuyendo a que se cometan graves violaciones de derechos humanos.
Hoy por hoy el ejército marroquí está desplegando todas sus energías para endurecer su sistema combativo en el muro, es decir, la mayoría de las infracciones del cese de fuego se viola tajantemente sobre esta pared.
Todo esto ocurre en el momento que la comunidad internacional guarda un aturdido silencio sobre las secuelas que se derivan a raíz de la construcción y constancia de este vergonzoso muro
El pasado 8 de octubre el gobierno marroquí encarcelo a unos activistas de derechos humanos por el mero hecho de haber salido del Sahara occidental; o sea de la zona ocupada y taponada por el muro.
Semanas más tarde la activista saharaui Aminetu Haidar fue expulsada en contra de su propia voluntad, obligándola en una confabulación clara con el gobierno español de abandonar su tierra, sus hijos y su familia. Pero por cual razón? solo nos hace recordar la tradición en los espaciosas cárceles como el Sahara, que la conducta está sujeta a un código único:
la doctrina Sharon que faculta la expulsión o el asesinato a los que se contraponen a sus ideologías. Extendiendo la represión total sobre el territorio saharaui.
Obviamente el aniversario del desplome del muro de Berlín, merece ser festejado, pero hubiera sido igualmente una oportunidad más para recordar a los que persisten en la astucia de separación, manteniendo o construyendo muros y recordarles que en algún día llegara la hora del desplome de los mismos.
Pero en cambio porque algunos países occidentales remiten señales al reino marroquí a perseguir en su perpetua intransigencia, porque los que presumen estar en contra de los muros, festejando la caída del muro de Berlín son los que no escatiman esfuerzos para que otro muro poseyera más vida! Estaría pues Felipe González, Zapatero, o Nicolás Sarkozy, dispuestos a decir a Mohamed 6, por favor derrumbe el muro que habéis construido en el Sahara, como lo había solicitado el ex presidente USA Ronald Reagan a Gorbachov a finales de los años ochenta del siglo pasado en la Puerta de Brandeburgo, cuando le dijo: ¡Tire abajo ese muro!
Tendrán estos, bravura para exponer eso: DUDO.
Sería útil recordar al gobierno de Marruecos y sus aliados que en vez de reforzar a sus muros, en contra de las aspiraciones de los autóctonos y los países colindantes convendría entonces al pueblo saharaui como el marroquí merecidamente convivir en paz, a base del respeto mutuo, entablando un acuerdo de paz que culmine con las pesadillas que viven.
Fomentando la cultura de confraternización y construyendo paces.
En este sentido, el presidente de la RASD remitió una carta al alcalde de Berlín haciendo suyas las esperanzas expresadas por este al recibir el galardón en ocasión de la caída del muro de Berlín, alegando además que el derrumbamiento de este ultimo " aliente a devastar otros muros".
Hace años, o sea en la guerra, los muros nunca impidieron, las batallas del ejército saharaui encarnan en si ese reto , en cambio resistirá el muro de las sinvergüenzas caras a las vías políticas y pacifistas? , en aquel entonces se evidenciara una vez más que los muros, como las minas obstaculizaran pero no impedirán. Es hora de acción ya.
Gaici Nah